Como veis, en un par de días he cambiado la nieve por el mar. ¡Qué lujo!
Como bien dicen algunos, soy el maestro Liendre, que de "to" sabe y de "na" entiende. Por si tenía poco con el mountain bike, el patinaje, la natación, el esquí, el senderismo, el fútbol sala, el barranquismo... desde hace poco, me ha dado por aprender a hacer kitesurf.
La verdad es que, por ahora, el resultado es bastante desalentador: no consigo ponerme de pie en la tabla ni a la de tres.
Esta tarde, en un arranque de optimismo y gracias a la inestimable ayuda de mi amiga Montse (alias Capi), he bajado a Playa Granada (Motril) para intentar superar mi trauma con la tabla.
El viento era perfecto pero, como no, había unas olas impresionantes que han hecho conmigo lo que han querido. Así que otra tarde más que no consigo dominar la tabla.
Espero, en un futuro no muy lejano, poder deleitaros con unas fotitos "sobre" la tabla.
VER FOTOS